LA
EVOLUCIÓN ILUSTRADA (I).
-- CINCO --
Lo importante es tener claro
cada etapa y saberla diferenciar. En un principio nos basamos en la pura
imitación. Es el período en que tomamos de aquí y de allí sin hacer menosprecio
de nada, aun sabiendo que puede estar
mal, o que el resultado nos conduce a un final desastroso. Esto debe ocurrir
normalmente en la infancia donde vamos captando todo lo que nos rodea para
fortalecer el espíritu y la consciencia. ¡Está bien! ¡Hay que probar siempre para
hacer una selección de las cosas que serán válidas en nuestra vida! Pero esto
será como dije anteriormente, una etapa, y como etapa debemos concluirla y dar
paso a la siguiente para entrar en el círculo reducido de la evolución
ilustrada.
Hay dos maneras fundamentales
de alcanzar una evolución ilustrada. La primera pero no por ello la más legítima
es apoyarnos en algún estudio que nos pueda allanar el camino. La pregunta nos
la debemos hacer, es fundamental, qué estudiar para pasar a la siguiente etapa.
No importa lo que se estudie, la simple razón de tomar esta decisión significa
que no lo hicimos del todo mal en la infancia, imitamos hasta encontrar lo que
buscamos, y de esta manera estamos en disposición de obtener un logro. El
segundo modo o manera sería profesionalizarnos directamente a través del
trabajo, aunque no sea por la vía de la enseñanza superior. Aquí llegamos a ser
especialista de nuestra materia porque lo logramos con el aprendizaje directo. Es
otra vía y está muy bien.
De cualquiera de las dos maneras no
significa que hemos logrado la ilustración. Esto es nada más la base para saber
o ser consecuente de que no debemos someternos al tiempo y a los presentes hechos.
Desde este instante, al terminar una carrero o al elegir una profesión nos
abrimos hacia nuevas posibilidades en nuestro entorno. Es la etapa de la
inconformidad para no caer en la rutina de que mi vida ha concluido con la
etapa del conocimiento y ahora sólo me queda poner en práctica lo aprendido, no
es así, desde este instante comienza lo mejor; si estamos dispuestos entraremos
en la evolución que nos puede llevar a la ilustración.
En estos tiempos el ser
ilustrado es un factor a tener en cuenta cuando la sociedad nos conduce a la
inercia, a la aceptación de cualquier contrato para que estemos lo más estáticos
posible, porque una persona que solamente se dedica a un pensamiento fijo, es
un ser que no da problemas y es el que necesita el sistema para continuar con su
maquinaria demoledora. Ser ilustrado nos coloca en una nueva etapa en la que no
todos entramos porque se nos ha educado que después de un “cierto” aprendizaje
no debemos continuar intentándolo, porque más allá del conocimiento no hay
nada, solamente simples especulaciones de cabezas pensantes que rompen con el
sentir de la colectividad, y más que actores somos colocados en la platea para
ser simples espectadores de nuestra realidad. El inconformismo está mal visto
para algunos ojos que nos pretenden guiar.
Continuará……………