lunes, 23 de julio de 2012

¡LA EXCITACIÓN!






PARTE 10

__ ¡Tengo que llevar la iniciativa aunque esté acorralado por ambas partes! ¡No es posible que mis movimientos y mis ideas se encuentren secuestrados por mi prima y su amiga! ¿Cómo hacer para que comprendan que yo puedo tomar una decisión y ser muy imaginativo?
                Tomé la determinación de dejar en completa libertad la mano de Tatiana, para ver hasta dónde llegaba su osadía por escudriñar dentro de mis pantalones.
__ ¡La voy a dejar incluso si se encuentra con mi músculo en completa forma! ¿Pero si lo coge y se lo mete en la boca? ¿Qué estoy pensando? ¡Seguramente Tatiana no llegará hasta estos extremos! ¡Me gustaría que me la chupe toda la tarde! ¡Pensándolo mejor no, aún no me he duchado y hoy el calor ha sido aplastante! ¿Qué vergüenza si lo toma en sus manos y está.............? ¡No, mejor olvidarlo!
                Con todos mis pensamientos me olvidé de Flavia que continuaba con su propósito de introducirme por los ojos la teta del pezón profundo. Acostado en la hamaca su figura es hermosa. Veo sus pechos desde otro rincón y dan la impresión de ser más grande de lo normal. Una de las cosas que me excita es la composición de una mujer con los brazos levantados y apoyados en la nuca. Dejan la línea del torso interminable. Comenzando desde la cintura por toda las costillas hasta llegar al punto en que los pechos se unen con los axilas. Un perfil envidiable, y si la persona se llama Flavia y contonea su busto sobre mí, se me nublan los sentidos.
__ ¡Voy a tomar los dos pechos y los uniré para absorber sus pezones de un golpe! ¡No dejaré que la teta del pezón profundo continúe siendo la más llamativa, haré de la otra una franca competidora! ¡Eres bella Flavia y siento que me estoy perdiendo con solo pensarte! ¡No quiero imaginar cuando el verano termine y te marches junto con mi prima! ¡Mi prima! ¿Qué haces Tatiana?
                Tatiana con cuidado había llegado con su mano hasta mis calzoncillos. Por algún error, o a propósito, continuo de largo, y con sus dedos atrapo mis testículos que quedaron acorralados entre mis piernas y su diestra mano. ¡Era la primera vez que me tocaban los huevos!
__ ¿Qué se debe hacer en esta situación cuando una chica tiene en su mano dos huevos inexpertos? ¡No lo sé! ¿La dejo hasta hacer y deshacer? ¡En las películas porno que he visto, ninguna mujer coge los huevos del protagonista o de ningún otro; al venos las que yo he visto! ¡El pito sí, pero los huevos para qué! ¿Qué hago? ¡Tengo en mi cara un par de tetas que revolotean como moscas sobre mi cara, y una mano que pretende robar mi intimidad! ¡Debo hacer algo!
__ ¿Vamos al río? ¡...............! ¡Vamos al río!
                Me incorporé con decisión. Y mis palabras surtieron efecto. Flavia regresó a la realidad y sus pechos volvieron nuevamente a la intimidad de su prenda. Mi prima extrajo la mano de mis pantalones, no sin antes deslizarla con calma hasta encontrar por descuido mi pene que se encontraba en una posición intransigente. ¡Comprobó que el tiempo no pasa en vano, y que posiblemente todo cambia a mejor! ¡Sonrió, y se lamió las yemas de los dedos!
__ ¿Ahora? – Dijo Flavia levantándose de la hamaca.
__ ¡Sí, ahora! –Le contesté.
__ ¡Aquí estamos muy bien! –Afirmó Tatiana.
__ ¡Es que......es que.......los abuelos están cerca, pueden entrar en cualquier momento! –Era la mejor respuesta, y pensándolo por segunda vez, sería un peligro que nos encontraran de esta forma.
__ ¡Por mí está bien! –Fueron las palabras de Flavia.
__ ¡Entonces vamos! –Les dije a la vez que me incorporaba.
__ ¡Mejor lo dejamos para la noche! –Habló Tatiana-- ¡Hace mucho calor! ¡Voy a buscar algo de beber! ¡El último es mariquita!
                Y salió como un torbellino hacia el interior de la casa, y Flavia la siguió. Las dos tomadas de las manos saltaban por el pasillo principal. Se perdieron sin dejar rastro, de la misma forma que llegaron.

                 Continuará............................